La ignorancia: Atentado contra el arte en Bocas del Toro

Hay que leerlo, para creerlo!

Recientemente se celebró un Congreso de La Asociación Panameña de Artistas Plásticos en la provincia de Bocas del Toro, en Changuinola y en la isla Colón, donde asistieron 60 o más artistas de todo el país. Como colofón de esta actividad, la Embajada de los Estados Unidos, en conjunto con la Asociación, trajeron a un grafitero famoso de Los Angeles, California, Alejandro Poli, para dar una charla y pintar un mural con grafiti de calidad.

El dia domingo 18 de septiembre, Alejandro Poli (quien ha sido cubierto por la prensa local por su trabajo de grafiti en San Felipe) dedicó cinco horas de su arte para crear un grafiti de letras alusivo a la isla Colón donde, en sus propias palabras, “diseñaba a través de un catalejo imágenes de la arquitectura y la belleza de Bocas del Toro.”

El público se congregó en el parque frente al edificio de la Gobernación de Bocas, donde se encontraba el muro donde se haría el grafiti. Los bomberos lavaron el muro con la anuencia de las autoridades locales. Todos los funcionarios respectivos fueron informados.

Como el evento coincidió con la Feria del Mar, turistas y locales admiraron el proceso creativo y posaron frente al mural en proceso, con el pintor y con un artista de la Asociación, Roderick Gaytan (ICH), quien colaboró en el esfuerzo artístico.

Cuando Alejandro Poli concluyó el arte, la gente en el parque gritó, aplaudió, lanzó vítores y se entusiasmó con la idea de tener un grafiti propio y único.

La Asociación Panameña de Artistas Plásticos colocó una placa identificando el mural y Poli agregó con aerosol su agradecimiento a la Embajada Norteamericana por haberlo invitado.

Bocas del Toro estaba eufórico con su nueva adquisición y nuevo motivo turístico en el lugar.

El martes 20 de septiembre, el alcalde de la isla Colón dio la orden de derrumbar el muro donde se pintó el mural.  No da la cara para que le cuestionen.  Alega que él no se comunicó como era debido con una compañía constructora que levantaba unos gazebos en la calle contigua para fines comerciales, la culpa es de los trabajadores. (¡Ja!)

Tal y como lo lee, esto no es más que una constancia efectiva de la miopía intelectual y la ignorancia cultural que reina entre las “autoridades” de este país, quienes viven en la nebulosa feliz del que no sabe lo que hace.

Dicen que «la ignorancia hace piruetas parada en una hamaca.» No hay excusa que valga para semejante barbarie.

Juzque usted por su cuenta lo que acaba de leer. Páselo a otros, para que entendamos por qué ni el arte, ni la música, ni la literatura, ni el teatro, ni el folclor, ni el deporte en este país prosperan, a pesar de que somos «cosmopolitas», «modernos» y uno de los países más prósperos del área.  Aquí solo vale lo que se puede vender… $$$$$$$

Nilsa Justavino de López
Septiembre de 2011